Noticia


jueves, 4 de agosto de 2005

Skövde


El silencio se resguarda debajo de nubes blancas, que dejan asomar al sol, de vez en cuando. El tiempo es ideal, la primavera parece que aparezca ahora, ya en agosto.
La gente anda más lentamente, las mujeres más guapas reponen comida en los supermercados y en los cafés, en vez de perder el tiempo en pasarelas.
El sol nos acaricia la cara en una terraza, en el café del museo, mientras aun en silencio, se escuchan violines. Una manta apoyada en la silla, te ayuda a resguardarte de ese escalofrío que la plaza nos deja. El café, y lo mejor...

Me he sentido como en casa,... mejor que en casa, diría yo. He encontrado lo que buscaba, la tranquilidad, y a los amigos. Sin apremios, sin planes, disfrutando de los momentos.
Gracias S y A por hacerme sentir como en casa.
Así lo único que váis a conseguir es que vuelva.

1 comentario:

Sebastian Lineros dijo...

Si hay algo mejor que la visita de un amigo es que quiera volver.Vuelve compañero cuando quieras,si te pierdes te toco el violin y que te guie por estos bosque su sonido