Noticia


sábado, 6 de mayo de 2006

Experiencia

Experimenté el deseo de abrazar el cielo,
de dar gracias al universo por estar allí
Rozaba lo sublime, tocaba lo eterno
con la punta de los dedos,
acariciaba la vida,
superaba el ridículo,
comprendía la simplicidad

1 comentario:

libertad dijo...

Comprendía la simplicidad...sí, ahí está la clave de muchas de nuestras infelicidades, no comprendiéndola. Hace tiempo que pienso que cuando superamos nuestros conflictos internos, todo se vuelva más fácil, más simple, más maravillosamente simple.

(...De los cuentos de hadas o sus antítesis, nunca me gustó opinar, sobre todo porque me parece que la realidad tiene muchos más matices y es mucho más término medio -nunca es todo malo, ni todo bueno, y en ese equilibrio supongo que hay que aprender a estar- sobre todo porque es en él donde se vive)